JORGE ANDURELL: “En mi caso añoro el verde de Mercedes”

La influencia de San Patricio
“Yo nací en Los Toldos, partido de Gral. Viamonte, provincia de Bs. As.- comienza a contar Jorge, y de muy pequeños fuimos a vivir a Mercedes, porque mi papá empezó a trabajar en la planta de NeoGas, ruta 5 km 100. Comenzamos a vivir en la calle 8 entre 1 y 101, primer barrio donde estuve residiendo en Mercedes. Somos dos hermanos, uno que vive acá y una hermana que vive en Mercedes en calle 30 entre 9 y 11.

Hice la primaria (entré en 5to grado) en San Patricio e hice todo el colegio secundario allí, (promoción’80) de donde tengo mis más entrañables recuerdos, y fundamentalmente los más grandes amigos provienen de ese colegio. Hasta hoy en día nos juntamos con un compañero de colegio, Juan Pablo Estévez, por quien vine a vivir aquí. Siempre celebramos el día de San Patricio y nos juntamos con otros amigos.

Muchos recuerdos afloran ahora con la relación a los padres palotinos, recuerdo al padre Queen, al padre Peter, con los cuales teníamos encuentros, incluso los viernes a la noche antes de salir, pasábamos a visitarlos.
Un hecho que marcó mucho mi ingreso a la secundaria era el amor de los sacerdotes palotinos, de hacer guardia cuando fue el sepelio de los mismos en la iglesia San Patricio, en julio del 76. Es uno de los recuerdos más fuertes que tengo de mi vida, y también todo lo que tiene que ver con la vida escolar, y de ese secundario que fue muy importante para la vida de uno. Incluso tuvimos un equipo de fútbol acá en Puerto Madryn que se llamó San Patricio. Una fuerte relación de corazón hacia la institución y hacia la gente que estuvo con la institución. Fíjate cómo marca los caminos de la vida- afirma.

Recuerdo amigos como Félix Sétula, un equipo de barrio de pequeños del barrio El Durazno y la canchita del Martín Rodríguez, eran lugares de esparcimiento de pequeños.

También de chico me gustaba mucho el automovilismo, iba a San Andrés de Giles a ver las carreras del TC del Oeste. Cosas que recuerdo con mucho cariño. Viajaba solito, tendría tan solo 12 años y mi mamá me acompañaba hasta el colectivo, e iba a ver las carreras”-recuerda.

Destino Puerto Madryn
“Siguiendo con la influencia que ha tenido San Patricio en mi vida, debo decir que yo inicié mi carrera en el profesorado de Historia, gracias a la enseñanza que tuve de Ricardo Tabossi- confiesa.

Pero antes de llegar al lugar donde resido hoy en día, transité un camino bastante largo, en principio me fui a estudiar derecho a Bs. As. en el año 81, tuve que dar ingreso, pero a los pocos meses, regresé porque quería estudiar Historia. Mi papá me había enviado a capital con mucho esfuerzo, eso se lo reconozco y agradezco, pero yo quería seguir el profesorado, entonces me volví para estudiar en el Instituto Ciudad de Mercedes, del cual que tengo muy lindos recuerdos.

Terminé el profesorado por el 99 y trabajaba en el Comercial, turno tarde de preceptor, y después trabajaba en una mensajería que se llamaba “Noctámbulos”, de Roberto Tornatore a la noche, y también en la Subsecretaría del Menor y la Familia. Estuve del 87 al 90 en esos tres trabajos por lo que durante el día estaba bastante ocupado- dice. Recuerdo que llevaba pizzas a la noche, mucho antes de los que hoy se llaman “deliverys”.

Obviamente mi intención era ejercer como profesor, pero la dinámica de trabajo que había en Mercedes, con profesores con muchos años de carrera docente, hacía muy difícil el ingreso a la docencia a los que recién nos recibíamos. Entonces, empecé tratando de buscar otros destinos, ir a otros lugares y ahí recordé que en otra oportunidad había viajado a la cordillera, y me había impactado mucho la idea de trabajar en una escuela rural, lo que uno como joven planifica, a veces la realidad te lo modifica.

Me comentan que este amigo mío, Juan Pablo Estévez residía aquí en Madryn y él insistió en que viniese a inscribirme en los colegios de aquí en agosto de 89. A los dos meses me llaman para trabajar, pero no me animé, porque eran muy poquitas horas, y recién en febrero del 90 pegué el salto y me instalé definitivamente acá. Me quedé sin fondos para ir a la cordillera, pero no me arrepiento, ya que apenas bajé del colectivo “La puntual”, un colectivo que tardaba 18 h. desde Buenos Aires, me impactó la inmensidad del mar y esa sensación de libertad”.

Docente y funcionario público
“Al poco tiempo que llegué aquí, me llamaron a trabajar de preceptor en un colegio del cual soy director actualmente, a los 4 años asumí la dirección del colegio 728, y ya estoy pronto a jubilarme. Estuve de director 11 años, en este mismo colegio, del 94 al 2004, y a posteriori me llamaron a trabajar para la municipalidad y estuve como subsecretario de educación, secretario de gobierno y luego en ANSES. En el 2018 dejé ANSES porque necesitaba cerrar mi carrera docente dentro de la provincia y para poder jubilarme.

El rol de funcionario público fue una experiencia interesante desde todo punto de vista y sobre todo lo que implica la responsabilidad, pero a su vez muy estresante, constantemente las 24 horas pendientes, con situaciones que se vivencian en la ciudad. Yo tenía 8 áreas dentro del área de Gobierno: Tránsito, Transporte, Ecología, Protección Civil, era un área bastante grande e importante, y lógicamente te lleva a que se complejice en lo familiar, uno está fuera de la casa mucho tiempo, es muy absorbente. En ese momento el Intendente era Carlos Tomás Eliceche hoy diputado provincial. Hice dos períodos hasta que en el 2009 me ofrecieron la oficina de Anses de aquí, y estuve un tiempo, luego un período como concejal en el Concejo Deliberante, en el 2015, y después volví al Anses y un poco para cerrar la carrera, volví a la docencia, que de hecho nunca la dejé.”- señala.

La ciudad, la familia y las pasiones
“De hecho Puerto Madryn lo que tiene hasta hoy en día te diría es la apertura, porque es una ciudad joven en cuanto a la dinámica poblacional. La mayoría de las personas que habitan hoy la ciudad, que tiene alrededor de 120 mil habitantes, provienen de otros lares. Ellos hablan de los “NyC” (nacidos y criados en Chubut) y los venidos, como nosotros. Hoy en día ya tengo muchos años en la ciudad, ya soy un ciudadano más, pero la característica actual, de muchas parejas jóvenes que viene a buscar trabajo a la Patagonia, es muchos de afuera y pocos habitantes propios. Muchos tuvimos que emigrar y venir para otras tierras.

Acá formé mi familia, me casé con María Alicia Marcel (mercedina) en el año 93, llevamos 37 años de noviazgo y 27 de casados. Tenemos dos hijas, María de los Milagros, que es la mayor y estudia Relaciones Internacionales en la UCA y María Guadalupe, que terminó recién el secundario.

Con respecto a los gustos personales, ese amor por el automovilismo que tenía de chico lo sigo conservando. Me apasiona la Formula 1. Nunca vi, en vivo, una carrera de Fórmula 1. Lo más cerca de conocer un lugar fue en Mónaco en el año 2017, sacamos una foto en el casino, en esa famosa curva, y tuve la oportunidad de ver una Ferrari en Roma, y subirme a una Ferrari cerca de Montecarlo, pero yo sigo prácticamente todo el automovilismo, amén del fútbol y todo otro deporte que me gusta. Con un amigo rememoramos los años del automovilismo, 80 o 90 con la película Rush.

Actualmente estoy abocado a la investigación histórica realizando algunos trabajos. Nuestro apellido es de origen catalán, y estuve haciendo un curso sobre la Identidad Catalana, y me hicieron una propuesta de realizar un trabajo histórico, sobre un personaje histórico catalán en la Argentina, y después escribo algo sobre Malvinas, tengo algunos artículos para periódicos de acá, en relación a veteranos de guerra nacidos en Chubut. Hice un artículo sobre dos fallecidos en el crucero Gral. Belgrano. Y ahora estoy elaborando una nota sobre el primer soldado caído (no oficial) que cayó en Georgia y el primer conscripto que muere en la guerra del Atlántico Sur. Hay una situación de dificultad lógicamente en cuanto a la distancia, porque no se puede trabajar con el Archivo Gral. De la Nación o en la Biblioteca Nacional estando tan lejos, así que la idea es ir acercándonos a la provincia de Buenos Aires y sobre todo teniendo en cuenta que nuestras hijas ya están afincadas allá. Vamos a tener el corazón un poco divido pero bueno, todavía estoy analizándolo, en una etapa de análisis y ver qué hacer, pero por supuesto, la idea es no quedarme quieto”- confiesa.

Para finalizar quiero saludar a todos mis ex compañeros de primaria y secundaria, mis ex compañeros del profesorado de Mercedes, que tenemos una larga historia con el centro de estudiantes.

Uno recuerda o dice que añora a la gente más que el espacio, pero en este caso particular uno añora el verde, algo que aquí no podemos visualizar en nuestra ciudad. Un recuerdo entrañable que tengo es que cuando era chico y mi mamá me llevaba en bicicleta, me llevaba a que estudiara allí, y quizás el hecho de posibilitarme la educación con el esfuerzo y el trabajo de mi viejo, me ha hecho crecer en la vida.

Ese recuerdo de los trabajos de los padres también conlleva al esfuerzo que hace toda la gente que trabaja y construye una sociedad mejor”- concluye.