Locales
Opinión — Permiso para pecar de optimista
Por Walter Anido (Especial para La Verdad Mercedes)
Tal vez este artículo tenga un sesgo de optimismo ilusorio. Lo aceptamos desde el comienzo para evitar que se convierta en una conclusión del lector al final del mismo. No debe ser tampoco un pecado poder mirar el futuro con una visión positiva, aunque puedan existir datos macroeconómicos que vulneren esa concepción.
Desde 2018 a estos días la Argentina se fue sumergiendo en una crisis profunda y la actividad industrial cayó de manera estrepitosa. La mayoría de los índices se desplomaron: la capacidad de ahorro, el consumo, el poder adquisitivo, las fuentes de trabajo y por consecuencia las expectativas de crecimiento. Con esas variables y sumada la pandemia que terminó de arrasar con cualquier pronóstico de recuperación puede resultar impensado salir de la oscuridad en el corto plazo. No obstante, cuando se toca fondo, esas chances de resurgimiento suelen plantearse como una oportunidad. Los orientales suelen decir que las crisis representan oportunidades y en ocasiones esas oportunidades se presentan sin pedir permiso. Parecen conceptos contrapuestos: crisis y oportunidad.
Tal vez lo sean. Pero la existencia de algunos datos concretos nos permitirán ser optimistas y confiar en que Mercedes, en medio de esta crisis, tiene una gran oportunidad. Atrás dejaremos parte de la historia. La pasaremos rápido, Como mirando por el retrovisor. La década del 70 con aquella ley de Promoción Industrial que nos ponía en desventaja para la llegada de nuevas industrias, largos años de un sector industrial planificado creado en los 80 sin más beneficios que las leyes provinciales y nacionales, la falta de infraestructura en ese predio y la desinversión municipal y hasta la escasez del ingenio para seducir a los inversores que el partido de Mercedes tenía potencial de crecimiento.
Miremos entonces más allá de los beneficios impositivos, legales y de servicios, la ubicación estratégica. Las evaluaciones que realizan los inversores tienen en cuenta diversos aspectos como la ubicación, las redes de comunicación o la proyección de obras. Mercedes está a escasos kilómetros de los centros más poblados que tiene la República Argentina. Los millones de habitantes que pueblan el área metropolitana. Los accesos mejoraron con una ruta nacional 5 que tiene doble mano hasta nuestra “tranquera” y una ruta provincial 41 que independientemente si se convierte o no en autopista, es transversal a una innumerable cantidad de rutas nacionales. Cuenta con ferrocarriles además, aunque el transporte ferroviario de carga esté absolutamente devaluado. Pero los rieles aún están y ese puede ser un buen síntoma.
La reciente llegada de una inversión que significó la compra de unas diez hectáreas contiguas al Sector Industrial Planificado parece haber dinamizado estas cuestiones. Esas diez hectáreas se compraron hace casi una década y durante ese lapso no hicieron más que juntar malezas. Hace pocos días esas tierras se convirtieron en dólares frescos. Con la llegada de esa industria también aparecieron nuevas obras de infraestructura para el sector en general. Alguien del propio SIP admitió que la falta de inversiones en infraestructura postergó las chances de crecimiento que tuvieron otros parques industriales de la zona. Por ende pongamos en el retrovisor también ese pequeño detalle. Pero los inversores alemanes llegaron y dejaron su dinero. Algunas de las parcelas que estaban libres parecen haberse revalorizado y despertaron interés en otros inversores, incluso locales. Pero además, el producido de esa venta se destinará a la compra de nuevos espacios para posibles inversiones.
Entonces lo opaco empezó a mostrar un incipiente brillo. Porque en el plano de lo que puede considerarse información, no una simple percepción, sabemos que ya existieron contactos con dueños de un importante predio para que el SIP empiece a tomar una dimensión que lo pueda convertir en Parque. ¿Cuántas veces se alinearon los planetas de esa manera para pensar a Mercedes con un perfil industrial? No recuerdo que hayan sido demasiadas, por no decir que no recuerdo ninguna. Si resuenan en mis oídos nombres propios como Ferrero Rocher, Brahma, Coventry, Toyota o Pirelli. No escapa a la realidad que impera que es un momento extremadamente complicado para la Argentina y el mundo. Pero no implica ello que no pueda tomarme el individual atrevimiento de ser optimista y que ese optimismo no sea tan solo una ilusión. El futuro tendrá su veredicto implacable. Puede que entonces mi optimismo haya sido un pecado, pero es preferible pecar en el optimismo de ver un horizonte promisorio a quedarnos de brazos cruzados viendo como las oportunidades siguen pasando de largo.
-
Internacionales21 noviembre, 2024
Estiman que Ucrania dispone de unos 50 misiles ATACMS
-
Nacionales21 noviembre, 2024
Prórroga: seguirá hasta julio la emergencia energética
-
Provinciales21 noviembre, 2024
El gobierno bonaerense autorizó un aumento del 37,5% para los micros de larga distancia
-
Nacionales22 noviembre, 2024
El Gobierno envió un proyecto para derogar las PASO